Hoy tuve un día un poco especial en el trabajo. Lo especial es que hubo una reunión en la que se explicaron nuevos métodos a aplicar en el día a día con el fin de mejorar y de ser más eficaces y bla, bla, bla... Realmente salí con la idea de que algunos procedimientos se imponen de manera arbitraria sin pensar realmente si sirven para algo.
Lo mismo ocurre con las reglas. Realmente hacen falta reglas y normas o al menos pienso que generalmente el mundo funciona mejor con reglas (no soy muy amigo de la anarquía), pero siempre pensé que las reglas deben de tener un porqué (y no me refiero al "porque a mi me da la gana").
Cuando una regla consigue poner a todo el mundo en contra y hace que la gente se sienta molesta y trabaje peor, sin conseguir nada a cambio, realmente ¿sirve para algo?
Menuda manía que tienen las empresas en que sus trabajadores no usen internet. ¿De qué tienen miedo? Porque si un trabajador no quiere trabajar hay miles de formas de no hacerlo sin necesidad de usar Internet (vagos los ha habido toda la vida).
Puestos a prohibir, tendrían entonces que prohibir los móviles, los teléfonos en general, llevar el periódico a trabajar,llevar un libro, un mp3... No. Lo que prohiben es Internet.
Realmente los que hacen las reglas no tienen ni idea.