Iago ha empezado hoy un curso de natación en la piscina. El primer día se lo ha pasado muy bien en el agua, disfrutando de los juegos y la temperatura alta.
Debido a que va a cumplir un año, la monitora ha dicho que no puede bucear, como se ve muchas veces en la tele. Esto es debido a que los primeros meses los bebés tienen la capacidad de cerrar las entradas de aire y poder bucear, pero esa capacidad se pierde al llegar al primer año.
El niño se lo ha pasado muy bien la verdad y en ningún momento ha tenido miedo al agua, a pesar de que la piscina, aunque pequeña para los adultos, es una bañera muy grande para ellos.
sábado, octubre 21, 2006
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
1 comentario:
ellos disfrutan, y nosotros tambien.
Publicar un comentario